En enero de este año se promulgó en Chile la Ley N°21.643, también conocida como Ley Karin, que regula la prevención y sanción del acoso laboral y nombrada así por Karin Salgado, quien en 2019 se quitó la vida luego de sufrir este tipo de conductas en su lugar de trabajo. La legislación entrará en vigencia el 1 de agosto y llega como parte de los compromisos que Chile ratificó en el Convenio 190 de la Organización Internacional del Trabajo en 2019, que busca erradicar el acoso y la violencia en el trabajo.
¿Qué aspectos aborda la nueva ley y qué cambios traerá? Te contamos a continuación.
Anteriormente, el acoso laboral estaba tipificado en la ley N°20.607 y establecía que se tenía que dar como una conducta de hostigamiento reiterada en el tiempo desde un empleador o de un trabajador hacia otro. La ley Karin actualiza esta definición para hacerla más amplia, por lo que ahora se elimina la necesidad de que se repita en el tiempo, bastando una sola agresión o acto de hostigamiento para que se constituya el delito.
De este modo, se detalla un amplio rango de conductas que pueden constituir acoso laboral, acoso sexual y violencia, incluyendo por primera vez la violencia en el trabajo ejercida por terceros ajenos a la relación laboral. Otras acciones sancionadas por la ley incluyen ataques con medidas organizacionales como asignar tareas degradantes, aislamiento social de la víctima y burlas a la vida privada, entre otras.
Junto con esto, la nueva ley incluye la obligación de las empresas de prevenir la violencia y acoso laboral y/o sexual. En el Dictamen N°362/19 de la Dirección del Trabajo, emitido el 11 de junio, indica que las empresas deben tener un protocolo de prevención, así como un procedimiento de investigación que incluya medidas de resguardo y sanciones correspondientes.
La investigación de cada denuncia puede ser llevada a cabo internamente por la empresa o ser remitida a la Inspección del Trabajo. En ambos casos, el proceso debe llevarse a cabo en un plazo máximo de 30 días. Luego de esto, se cuenta con 15 días para aplicar sanciones si así lo amerita.
De este modo, la Ley Karin busca no solo combatir, sino que prevenir más eficazmente las situaciones de acoso laboral, sexual y violencia en el trabajo estableciendo nuevos protocolos y procedimientos. Las empresas cuentan hasta el 1 de agosto para adaptarse a las nuevas exigencias que tendrán, fecha en la cual entrará en vigencia la ley.