El Ejecutivo peruano ha modificado la Ley de Teletrabajo, generando un debate significativo sobre sus impactos.
Tras varias semanas de espera, se ha publicado la modificación de la Ley de Teletrabajo, una normativa que ha sido impulsada desde el Congreso, por la parlamentaria María del Carmen Alva. La Ley aprobada por la Comisión de Trabajo y Seguridad Social, y ratificada por el Pleno del Parlamento, generó un intenso debate por su enfoque restrictivo a las actividades de los teletrabajadores.
Aunque la Ley de teletrabajo en Perú se haya promulgado en junio del 2013, norma que estableció en su momento los lineamientos generales en forma especial de la prestación de servicios, pero siendo reglamentado en noviembre del 2015, como una norma que tenía como objetivo la inclusión de personas con discapacidad a la fuerza laboral.
Sin embargo, no es hasta la pandemia que se comienzan a replantear los nuevos márgenes de esa ley, y que, tras la discusión en el Parlamento, se han incorporado nuevas regulaciones.
Tras las modificaciones, por primera vez la ley incluye el reconocimiento de derechos específicos para los teletrabajadores. En el artículo 6, se agrega que los cortes de luz o interrupciones en el servicio de internet debidamente acreditados no podrán ser motivo de descuento en las remuneraciones. Lo anterior, representa un avance para garantizar que los trabajadores no se vean afectados por situaciones que están fuera de su control.
Con respecto al lugar donde se realiza el teletrabajo, el artículo 11 establece que los trabajadores deben informar a sus empleadores sobre cualquier cambio de lugar habitual con al menos cinco días de anticipación, salvo justificación. Lo cual, busca garantizar que tanto el empleado como el empleador estén al tanto de las condiciones de trabajo y los riesgos asociados.
Asimismo, dentro de los cambios está el contenido mínimo del contrato de teletrabajo, actualizado en el artículo 12, donde se establecen las condiciones para el retiro de documentación confidencial, asegurando que el trabajador cumpla con sus responsabilidades en este aspecto.
También, la ley ha implementado cambios, enfocándose en la salud y seguridad de los trabajadores, mencionando en el artículo 23, donde se obliga a los empleadores a comunicar y capacitar a sus empleados sobre las medidas de seguridad que deben cumplir en su entorno laboral, como la implementación de descansos y pausas activas para prevenir problemas de salud.
A pesar de los cambios en pro del trabajador integrando nuevos derechos, la modificación incorpora uno de los cambios que más ha llamado la atención de forma negativa, es la prohibición para los trabajadores de realizar tareas domésticas durante la jornada laboral. Según la nueva norma, los teletrabajadores no podrán abandonar su lugar habitual de trabajo, ya sea en forma física o virtual, para dedicarse a otras actividades.
La restricción ha suscitado preocupación sobre su impacto en la calidad de vida y productividad de los empleados, quienes durante la pandemia lograron adaptar mejor su entorno laboral a sus propias necesidades personales.
La modificación de la Ley de Teletrabajo en Perú refleja una postura más restrictiva hacia esta modalidad laboral, generando múltiples reacciones en la sociedad, donde la preocupación de los expertos está orientada a los cambios, la disminución de la productividad y la satisfacción laboral.
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