El organigrama es una de las herramientas más importantes en la organización de un proyecto. Se trata del recurso que nos permite conocer cómo se organiza cada equipo y departamento.
Es esencial porque convierte en transparentes las relaciones entre los trabajadores además de los roles y responsabilidades de cada uno de ellos. No obstante, aunque parezca un elemento básico no existe en todas las compañías, o al menos no de forma pública.
En este post te explicamos por qué es imprescindible contar con un buen organigrama, los diferentes tipos que existen y sus ventajas principales.
¿Qué es un organigrama?
Como decíamos, un organigrama es la representación gráfica de la estructura jerárquica de una organización. En ella podemos ver los niveles de jerarquía y sus responsabilidades. Por lo tanto, un organigrama también muestra las divisiones, los elementos de autoridad y la relación entre ellos.
Su diseño, habitualmente, es lineal y vertical. Aunque también puede realizarse de otras formas que explicaremos a continuación. Cualquiera de estos diseños representa a la perfección los niveles jerárquicos que comentábamos empezando siempre por los líderes de la compañía.
Tipos de organigrama
Los organigramas se diferencian según su ámbito, finalidad, contenido, presentación y naturaleza.
Por su ámbito
Se trata del tipo que se centra en el entorno donde se realizan las labores de una organización y pueden ser de dos formas:
Generales: Aquellos que exponen el sistema jerárquico y, por ende, los más utilizados.
Específicos: Los que muestran detalladamente la organización de un área determinada. Por ejemplo, el organigrama del departamento de Recursos Humanos.
Por su finalidad
Informativo: Se trata de un organigrama creado para informar a todas las personas que trabajan en la organización.
Analítico: En el que se estudian aspectos relacionados con el comportamiento organizacional. Por este motivo sólo se dirigen a las personas que poseen conocimientos específicos sobre el área.
Formal: Es un organigrama que se realiza para presentar trámites de aprobación de sociedades en organismos públicos.
Informal: Se considera informal a toda representación que se planifica, pero que todavía no ha sido aprobada.
Por su contenido
Integrales: Representan las unidades administrativas de una organización.
Funcional: Los organigramas funcionales no solo representan las unidades administrativas, sino también las estructuras.
De puestos: Como dice la propia definición, representan la cantidad de puestos y plazas existentes y requeridas en la organización.
Por su presentación gráfica
Vertical.
Horizontal.
Mixtos: Donde se utilizan los dos anteriores.
De bloque: Representaciones en forma de pirámide.
Circulares: En este tipo de organigramas, el directorio supremo se encuentra en el centro y alrededor el resto de autoridades.
Beneficios de los organigramas
Si todavía tienes dudas sobre implantar o el sistema organigramas en tu proyecto, desde GeoVictoria te enumeramos los principales beneficios que puede aportar este método de organización:
Ayuda a los potenciales inversores a saber quién dirige la empresa y los diferentes cargos.
Permite que todos los trabajadores conozcan la jerarquía.
También ayuda a la socialización entre los propios empleados.
Un buen organigrama empresarial ayuda a conocer los cambios en los proyectos.
Tu opinión nos importa, ¡déjanos un comentario!