El 01 de agosto entra en vigor la ley, la cual su nombre deviene del lamentable deceso de Karin Salgado, técnico en enfermería que tras ser sujeto del constante acoso laboral, malos tratos y sanciones administrativas, terminó con su vida.
Tras ese trágico acontecimiento, se otorgó mayor visibilidad a las temáticas de hostigamientos, lo cual generó respuestas por parte de la autoridad, que terminó dando origen a la Ley N.º21.643, conocida como Ley Karin, la cual “Modifica el Código del Trabajo y otros cuerpos legales, en materia de prevención, investigación y sanción del acoso laboral, sexual o de violencia en el trabajo”.
A solo unos días de su entrada en vigor el 01 de agosto, es vital que tanto empleadores como empleados se preparen para cumplir con las exigencias que establece esta ley. La Ley Karin, busca garantizar un ambiente de trabajo seguro y saludable para todos los trabajadores. Esta normativa establece la responsabilidad de los empleadores en la identificación y gestión de los posibles riesgos laborales, así como en la adopción de medidas preventivas adecuadas.
Además, promueve la igualdad de género en el ámbito laboral, impulsando la implementación de políticas y acciones afirmativas que contribuyan a la eliminación de la discriminación y la violencia de género en el trabajo. Se enfoca en la prevención y erradicación de situaciones de acoso laboral y violencia de género, promoviendo un entorno laboral respetuoso y equitativo para todas las personas.
Entre las medidas a implementar se encuentran actualizar matrices de riesgo, elaborar protocolos de prevención y procedimientos de investigación en casos de acoso y violencia, así como incorporar la "perspectiva de género" en las relaciones laborales.
Es fundamental que tanto empleadores como empleados conozcan a fondo esta ley y se preparen adecuadamente para su cumplimiento. La integración de la perspectiva de género en las relaciones laborales son acciones que buscan para cumplir con las exigencias de la Ley Karin y promover un ambiente laboral inclusivo y seguro para todos.
La implementación de la Ley Karin implica una serie de desafíos para las empresas. Entre ellos, se destaca la necesidad de internalizar el conocimiento en prevención de riesgos psicosociales, contar con mecanismos eficaces para la investigación pronta de conductas de acoso y violencia, y asegurar la imparcialidad en los procesos de investigación interna.
Es en este punto que entra la correcta implementación de los mecanismos y protocolos de investigación, teniendo en cuenta que tanto el sector público como privado debe prevenir el acoso laboral, sexual y la violencia en los entornos de trabajo.
A pesar de los retos que conlleva la Ley Karin, una adecuada gestión y capacitación permitirá a las empresas mejorar su conducta organizacional, fortalecer la seguridad de los trabajadores y estar preparadas para enfrentar cualquier requerimiento legal que surja en este proceso.
La entrada en vigor de la Ley Karin marcará un antes y un después en las relaciones laborales en Chile, requiriendo un enfoque proactivo y comprometido para garantizar ambientes laborales seguros y libres de acoso.